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PUBLICACION REVISTA D

domingo, 12 de octubre de 2014

LOS IDIOMAS DE GUATEMALA



LOS IDIOMAS DE GUATEMALA

El idioma o la lengua es el alma de la cultura. Cuando un idioma muere, desaparecen riquezas de una cosmovisión y de los seres humanos que compartìan dichas ideas y valores.

El lenguaje permite comunicaciòn y expresiòn de sentimientos en pensamientos hablados. Teniendo relaciòn estrecha la forma y los conceptos de una cultura determinada.

En el paìs de Guatemala, cuyo territorio esta situado en Amèrica Central se hablan 24 idiomas, y son el medio de relacionarse diariamente en su entorno comunitario.
El Xinka, el Garifuna, 21 mayas  y el Español.

Asì mismo existen prejuicios e ideas no superados por la poblaciòn y poca apreciaciòn positiva acerca de nuestra riqueza plurilingüe.
Se cree fuertemente que el àmbito educativo puede ser influenciado negativamente asì como la formaciòn acàdemica, si la enseñanza se desarrolla en diferentes idiomas.
como resultado la mayorìa de personas prefieren aprender un idioma extranjero a un idioma nacional.

Idioma y lengua son sinònimos, los cambios que se suceden de region a region de los mismos se denomina dialecto.
Por ejemplo: No es lo mismo el Xinka de Chiquimulilla, al Xinka de Jutiapa, tiene sus diferencias, pero ambos dialectos nacen del idioma Xinka.
Asì podemos citar otro ejemplo; el español que se habla en la capital tiene tambien sus cambios si lo comparamos con el de Zacapa o Chiquimula, pero su raìz es el idioma Español.

Es incorrecto cuando hablamos de lenguas referirnos a ellas como dialectos, pues son en su totalidad idiomas.
Algunas ideas de las varias equivocadas es que nuestros idiomas o lenguas son de menor valor y se llega hasta el menosprecio de las mismas, negàndonos el derecho a la apreciacion integral de nuestra cultura Guatemalteca.

Solamente en Huehuetenango se hablan ocho lenguas: Awateko, Chuj, Kichè, Akateko, Jakalteko, Q’anjob’al, Mam y Español.
Otra cosa curiosa, es que el estado guatemalteco, se organizò desde sus inicios sin tomar en cuenta estas diferencias idiomàticas culturales. Se formò desde un criterio polìtico etnocèntrico, alejado de una realidad que no se puede negar ni mucho menos ocultar.

Por ese mismo desconocimiento, no valoramos, mucho menos nos interesamos por conocer esta riqueza cultural; afectando como concecuencia la paz y la armonia de la relaciones entre personas diferentes a nosotros, cayendo en prejuicios poco reales y disminuyendo nuestra calidad de convivencia.